Comenzó el tercer juicio y declaró Marcos Graín

En el comienzo del tercer juicio oral que busca esclarecer el asesinato de Paula Toledo, el único imputado, Marcos Graín pidió declarar luego de que se le leyera la acusación.

Grain contestó preguntas de sus defensores, de la Fiscalía y de la querella. Lo hizo en ausencia de Nury Ribotta que al ser testigo en la causa se tuvo que retirar de la sala a pedido del Tribunal. 

Relató que "el 30 de octubre tuve contacto con Paula Toledo hasta las 19.30, fumamos un cigarrillo juntos y luego me fui a mi casa donde me quedé con mis padres, me enteré de la muerte al otro día". 

Reconoció que "conocí a Paula un mes y medio antes de su muerte, fue compañera del colegio de mi hermana, entablamos una relación de amistad, tuvimos sexo tres veces pero no eramos novios, ella me contaba que tenía problemas con su hermano porque no le gustaba que estuviera conmigo y un grupo de amigos que teníamos y además  me dijo que era mala la relación que tenía con su madre" y agregó que "la madre a Paula la trataba de loca y atorranta". 

Según  Grain "Paula iba todas las tardes a mi casa, se quedaba con mi mamá charlando, era una chica linda, simpática, compañera y buena persona". 

Dijo que "no frecuentaba la casa donde ocurrieron los hechos que terminaron con la vida de Paula, solo fui un par de veces a trabajar porque la casa era de su amigo Baigorria que la iba a restaurar" y mencionó que "la única vez que estuve en esa casa con Paula fue una vez en la que tuvimos sexo". 

Detalló que "el grupo de amigos lo conformaba Muñoz, Torres, Maravilla , Bordón, Yañez y otros más. Con  los Echegaray y Gauna no me juntaba, los hermanos tenían problemas con Torres y por ese motivo el contacto era solo un saludo cuando nos veíamos por la calle" y admitió que "Paula también tuvo relaciones sexuales con Torres y Muñoz que nunca me molestaron". 

Lo cierto es que el imputado tenía una relación especial con Paula pero "nunca fuimos novios" dijo Grain que cuando ocurrieron los hechos peinaba rastas y trabajaba como artesano y ayudante de albañil . 

En este contexto describió, con ayuda de un mapa y con asombrosa precisión, tras 17 años, donde vivían cada una de las personas que formaban parte del círculo de amistades que frecuentaba Paula y de las personas que fueron imputadas por el crimen (Gauna y los Hermanos Echegaray).

Respecto al crimen y a la madrugada cuando ocurrieron los hechos, Graín se desligó de todo lo sucedido y dijo "estoy tranquilo, siempre estuve a derecho, yo soy inocente, no estuve en ese lugar ". 

Después del hecho, explicó que " me enteré por mis padres y mi hermano, me preguntaron si Paula tenía un buzo gris y les dije que sí". Es que Grain nunca se acercó al lugar donde quedó el cadáver de Paula y señaló que "recién a la tarde del 31 me confirmaron que era ella la chica asesinada". 

Confesó que un par de días más tarde se cruzó con los hermanos Echegaray que le dijeron que "en ese lugar se habían mandado un moco y sin nombrarlos mencionó que se les había ido la mano". 

Lo cierto es que Graín, en su  coartada dejó en claro que esa noche estuvo en su casa, que tuvo contactos con Baigorria y con Torres pero que nunca salió de su domicilio y agregó que "no fui al velorio de Paula, lloré su muerte". 

Denunció presiones de la policía para que incriminara a los Echegaray y una mala tarea de los abogados que lo asistieron porque según Graín " no puedo asegurar quién fue el que mató a Paula". 

También relató que "fui una sola vez a la casa de Paula a buscar un cassette que me iba a prestar, su mamá salió y me corrió a escobazos".. 

Por último afirmó que "quiero que se sepa la verdad, que Paula pueda descansar en paz, soy inocente, esto va a quedar como que nadie la mató, no tuve participación en el crimen no la ví esa noche". 

Este es el segundo proceso que enfrenta Graín como imputado en la causa, en el primer juicio no estuvo, el segundo se anuló y en este quedó como único imputado tras una resolución de la Corte de Mendoza. 

Luego de Graín ingresó a la sala el médico forense Francisco Talío que fue el encargado de realizar la necropsia. Antes de responder todas las preguntas técnicas sobre las heridas que encontró en el cuerpo de Paula Toledo anticipó que " en la realización de la autopsia,( cuestionada por alguna irregularidades en la preservación de las pruebas), he cumplido con todo el protocolo de cabo a rabo". 

A Talío no se le hicieron preguntas sobre la metodología porque está siendo investigado por eso en otra causa y para preservar su principio de inocencia, los jueces pidieron que las preguntas estuvieran relacionadas con el estado del cuerpo de la joven.