Estuvo cuatro años en prisión, se reinsertó en el fútbol de Chile y se convirtió en refuerzo de Independiente

Independiente sigue en busca de reforzar el plantel de cara a la temporada 2025 y, después de concretar el arribo de Pablo Galdames como el primer fichaje, abrochó su segunda incorporación: Luciano Cabral.

En un pasado, el talentoso futbolista de 29 años estuvo cuatro años en prisión tras ser considerado “coautor de un delito de homicidio simple”. Luego, se reinsertó en la actividad en Chile y pasó por México.

Julio Vaccari se mostró firme respecto al rearmado del vestuario de Avellaneda y, después de depurar el plantel con una serie de salidas de futbolistas que no estaban en la carpeta del entrenador, la dirigencia del club acordó de palabra la transacción del mediocampista ofensivo.

En principio, la negociación, en la que estuvo vinculado el Grupo Pachuca, se cerró a partir del pago de un millón de dólares por el 50% del pase. Al mismo tiempo, la institución argentina le cedió el 50% de la ficha de Braian ‘Chaco’ Martínez, quien estaba cedido en el Everton de Chile.

De esta manera, la operación concluyó con la llegada de Cabral al Estadio Libertadores de América hasta diciembre de 2027. El volante, que integra el plantel de la selección de Chile desde noviembre, viene de marcar un gol y dar tres asistencias en 15 partidos con el León de México. No obstante, su mejor momento futbolístico estuvo ligado a su debut en Argentinos Juniors, donde se destacó en el Ascenso y en la Primera División.

Sin embargo, su proyección se cortó cuando en 2017 fue privado de su libertad al estar vinculado a un homicidio, mientras estaba jugando en el Atlético Paranaense de Brasil.

En la madrugada del 1° de enero de ese año, Joan Ariel Villegas Gualpa, de 27 años de edad, murió de un piedrazo en la cabeza en una pelea. Tres días después, Luciano Cabral se entregó a la policía después de que su padre, José Cabral, y su primo, Áxel Olguín, hubieran sido detenidos.

En junio de 2018, la justicia dictaminó que el jugador fue culpable como coautor del delito de homicidio simple y fue sentenciado a nueve años y seis meses de prisión. De esta manera, permaneció en el Complejo Penitenciario IV de San Rafael hasta el año 2021.

Por su parte, su papá recibió una pena de 16 años de cárcel, luego de que confesara haber sido el autor del asesinato. En cambio, Olguín fue condenado a ocho años de prisión, mientras que Brian Santana, también señalado y menor al momento del hecho, fue absuelto.

Cabral logró la libertad condicional en octubre de 2022 a partir de su buen comportamiento en la Colonia Granja, donde se dedicó a trabajos agrícolas y le permitieron entrenarse. Argentinos Juniors le abrió las puertas del Centro de Fútbol Profesional “Sergio Daniel Batista” para volver a cobijar al diamante en bruto que supo ser en su momento.

A pesar de que el mendocino no volvió a vestir la camiseta del Bicho de forma profesional, su carrera prosiguió en Coquimbo Unido de Chile, donde se reencontró con su mejor versión en el terreno de juego. Luego de una temporada, recaló en León de México, para ahora volver a tener revancha en el fútbol argentino de la mano de Independiente, que le ganó de pulseada a Colo-Colo.